Si en alguna ocasión, me encontrara con una tetera color oro, y al
frotarla un encantado genio me concediera volver en el tiempo, de tal manera me diera el
deber de escoger un momento, una vivencia, un lugar, una amistad, un amor entre
otras cosas, sin pensarlo dos veces evocaría a mi memoria los momentos más complejos. Tengo
claro que mientras uno más sufre, mas llora, mas se resigna, el momento resulta
mucho más significativo, el lugar se crea más importante y la persona NUNCA se podrá olvidar.
Si tuviera que escoger un momento
en mi vida y entrar en él, tengo prácticamente decidido que pondría el reloj
hace poco más de un año atrás, cuando mi vida no tenia limites, tapujos ni
razón, en aquellos días que lloraba abrasada a un escusado, soñaba bajo las
estrellas tomada de la mano de algún extraño y veía los aeroplanos deslizarse
en mi cabeza.
Es delirante pensar, que tantas
canciones ocuparon mis momentos, que tanto alcohol corrió por mis venas, que
tantas lagrimas acariciaron mis mejillas, y asi quede, llena de recuerdos, lugares, personas, estrellas, nubes,
unicornios, besos, canciones y un mundo del cual nadie se preocupa. Así quede
loca, libre y un poco más honesta. Así quede con mis pulmones atormentados por
tabaco, con mis ideas presas de productos desinfectantes. Aquí estoy rodeada de
otras personas, sumergida en otro mundo, guiada por nuevos sueños, llena de
errores y aun con mi imaginación intacta.
Si me dieran la posibilidad de
regresar aquel colegio, de ponerme ese uniforme, de estar en esas casas, de
vestirme solamente con los polerones anchos obsequiados por mis amigos, de dormir en los lugares que la
noche me deparara, de arrancar nuevamente del refugio cuando los rayos de sol
acariciaran mis mejillas, si regresara a AQUELLOS TIEMPOS sin dudarlo cometería
los mismo errores besaría a las mismas personas, tomaría las cosas de la misma
manera. Pues creo que cada momento me guío a aquel norte en el que hoy en día
me desplazo, por otro lado se que perdí tiempo, amigos y razones.
En ocasiones me arrepiento de no
haber sido más rebelde, de haber dicho las cosas a la cara, ya que hoy en día
es muy complejo admitir que realmente soy una mala hija, que tomo más de la
cuenta, que me satisfacen las drogas, que en escasas ocasiones me calma el
tabaco. Es difícil que todo el mundo conozca mis imperfecciones y que mi
familia aun me venere, es como de una película de ficción en donde algún momento las cosas se saldrán de control
y todo quedara en pedazos de colores abstractos.
Y bien si luego el genio me
permitiría cambiar algo de mi presente simplemente lo enserraria nuevaente en
la botella y se lo dejaría a alquien con peor surte, por que bueno auque en mi
casa cada dia la relacione son mas escasa y mi papa ya no cree tener el deber
de trabajar, mi vida es prácticamente perfecta, tengo lo que siempre quise.
Poseo un sueño, y creo tener lo necesario para lograr conseguirlo, tengo amigos
que han demostrado estar conmigo hasta
el final de los finales, más de un amor toca mi puerta, mas de una ilusión
acaricia mi mente, no imagino mi vida de otra manera, no logro descubrir una NICOLLE sin trabajar de
empaque en un supermercado, sin tratar con las cajeras, bromear con mis
compañeros de turno, sin discutir con esos encargados, no la imagino sin ser
jefa de la compañía Antu, no imagino una Nicolle sin esas adorables niñas que llenan su mente,
su vida, su ser y su tiempo, no la imagino sin ser parte del grupo scout
Marepuantu y aun menos lejos del escultismo. No imagino una Nicolle en sin
pasar al menos un día a la semana en los pasillos de La Upla y otros tantos en
su casa leyendo, estudiando o con los ojos clavados a un ordenar, no la dibujo
sin estudiar lo necesario para ser una linda periodista, sin estar tirada horas
y horas en patio y/o frontis del establecimiento de educación superior, no
podría ver una Nicolle sin salir por alcohol y historias un par de veces al
mes, sin compartir tanto con sus nuevos como viejos amigos, sin buscar una cita
para llenar las tardes . No la imagino siendo pareja de nadie, ni mejor amiga
de alguna muchacha, no la pinto más seria tampoco más ruda, ni menos egocéntrica, no me imagino madura,
callada, distante. Es la Nicolle que todos quieren o muchos odian, es la
Nicolle que llena mi vida la que me hace feliz, que a veces no es más que un
vil personaje pero que aun asi sirve de careta y mas que eso la que me permite
ser fuerte pensar en el pasado, viví el presente y planificar el futuro, amo
ser esa NICOLLE, esa niña de brazos anchos, de tés morena y ojos normales, esa
“casi adulta” de pelo liso de ideales amoldables y pensamientos con algo de
revolución, esa de labios fáciles y momentos irrisorios, amo ser yo siempre
digna, siempre espontanea siempre honesta, siempre escritora (aunque escriba
mal).
Aquí estoy a paso de caer de
sueño, ordenando mi habitación, sin una lámpara ni un genio, sin momentos, solo con recuerdos, solo con dulces
anhelos .